Comenzare esta narración aclarando que ya van más de dos meses
que no hay día en que no sueñe con algo extraordinario. Todos tan distintos y
de alguna forma quizá estén conectados, de tantas visiones fantásticas de otros
mundos u otras realidades ya no puedo distinguir entre un sueño o una
pesadilla, he aprendido a amar ambas.
¿Cómo sucedió? No lo sé. No sé si fue un ataque de insomnio
verdadero, el cual descarto por que no fue una simple ausencia de sueño, no sé
si fueron los tragos de whisky con energizante que bebí esa tarde, que al igual
descarto porque anteriormente ya los había bebido sin sufrir alguna
consecuencia.
Tal vez mis nuevos gustos un tanto bizarros tengan algo que ver,
tal vez mi indiferencia terrenal estuvo algo apegada a los hechos, solo puedo
decir que algo en mi mente está siendo transformado; o quizás algo fue
activado. Es difícil describir el pavor y la desesperación que sentí en aquel
escenario lleno de oscuridad y perversidad; Y con grato empeño tratare de que
usted lector imagine y sufra el terror que yo sentí aquella noche….
Antes de comenzar a relatar los sucesos ocurridos (posiblemente
solo en mi mente) aquella noche, me siento con la obligación de relatar
brevemente lo que soñé tan solo un día antes. Era de noche y yo estaba en la
habitación más alta de algún hotel con alguien más… Yo miraba fijamente a la
persona que se encontraba frente a mí, de espaldas. Esta persona estaba mirando
melancólicamente a través de un gran ventanal al vacío y, en el momento en que
di un paso hacia él, este decidió terminar su vida saltando por la ventana.
Ante tal espectáculo me quedé estupefacto y con más dudas que sorpresa.
Al dar un pestañeo lo primero que observo es a alguien más que
se encuentra en esa misma posición. Sin pensarlo decido correr hacia este, pero
antes de poder sostenerlo… el decide saltar. Cerré los ojos profundamente y
cuando los abrí ya me encontraba fuera del edificio, frente a este para ser más
exacto. Recuerdo estar observando desde una banca los cadáveres preguntándome
porque lo habrán hecho, mis reflexiones no me llevaban a nada, de pronto, otra
persona golpeo contra el suelo.
Me estremecí, mis reflexiones se transmutaron, mis ideales se
quebrantaron; dos minutos después alguien más cae del cielo y este proceso se
repite 5 o 6 veces más. Cuando todo por fin termina decido levantarme de la
banca e ir hacia ellos para observar sus rostros, afortunadamente desperté a
medio camino.
No tengo conclusiones ni comentarios que decir sobre ese hecho
que sucedió dentro de mí, me reservare a recordarlo y mantendré la esperanza de
algún día olvidarlo. Decidí relatar este sueño, ya que, quizá de alguna forma
fue una advertencia de lo que me ocurriría la siguiente noche.
Fue un gran día, lo disfrute mucho; al caer la noche ya estaba a
punto de irme a acostar, cuando de pronto me quede hablando con una bella joven
hasta algo tarde… terminamos de hablar cerca de las 3am y a continuación apague
el computador junto con todas las luces de la casa. Me recosté muy cansado en la cama, dispuesto
a dormir, aunque, algo me incomodaba… la casa estaba totalmente vacía y la
oscuridad era lo único que se podía percibir, el hecho de estar totalmente solo
comenzó a afectar mi imaginación, cada instante que pasaba la atmosfera se sentía
más y más pesada….
Decidí que lo mejor era no pensar en esto y tratar de dormir,
cerré los ojos y en vez de la esperada oscuridad que deseaba ver, lo que me
tope frente a mi fueron siluetas negras danzando, queriendo encontrar una
forma, pensé que quizá estaba soñando y decidí seguirlas con la mirada hasta que
la por fin lograron su cometido… frente a mí en completa negrura se postro una
gran mascara blanca con labios pintados de rojo, sentí gran curiosidad, la
máscara estaba de lado, sin postrar su mirada sobre mi… el pánico se comenzó a
apoderar de mi organismo cuando esta comenzó a girar sobre su propio eje, para
ceder su campo de visión a mi persona. Abrí los ojos sobresaltado, nada había
frente a mi… solo penumbras y el desconcierto de lo que acababa de pasar no
haya sido un sueño.
Me pare velozmente de mi lecho e instintivamente prendí la luz
de mi cuarto; a continuación me creí algo aliviado, aunque aún me sentía
cansado y con sueño así que decidí encender la luz de afuera, apagar la de mi habitación
y dejar la puerta ligeramente abierta… las figuras extrañas comenzaban a
desaparecer con los pequeños signos de luz que habían en mi cuarto. Pasó una
hora y aún seguía desconcertado, puesto que a lo lejos se escuchaban murmullos
y ruidos que considere insignificantes, me aferre a la idea de que mi mente me
estaba jugando una broma de muy mal gusto.
Recuerdo haber estado ya dormitando, estaba ya a nada de un
sueño muy profundo, y entonces escuche un llanto desesperado de un bebé, abrí
los ojos de inmediato muy desconcertado; para después aterrorizarme aún más al
volver a escuchar el llanto; no había sido parte de algún sueño, era parte de
mi realidad… el sonido provenía justamente de afuera de mi ventana, el llanto
comenzó a tornarse como un maullido, mi cerebro me forzó a pensar que lo que
estaba afuera era un gato con maullido de llanto de bebé.
No sé cuánto duro ese llanto, pero cuando termino solo cerré los
ojos deseando no tener que volver a abrirlos. Lo siguiente que recuerdo es
estar con una chica que me gusta mucho, y a continuación alguien me despierta
gritando mi nombre airadamente: URI!! URI!!!; fue lo que escuche. Al abrir los
ojos mis manos estaban sobre mi pecho atadas entre sí muy fuertemente.
La casa estaba vacía y no había nadie tocado la puerta, parece
ser que quien me llamo venia de mi interior o quizá de algún lugar invisible a
nuestros ojos.
Fue una gran noche.